Al ver la Salomon Skin Pron 10 Set por primera vez nos quedamos cautivados por su color verde chillón poco frecuente en las mochilas de Salomon y en las mochilas de Trail Running en general. Pero no solo nos fijamos en el color, también en todos los bolsillos que tiene y los portabidones delanteros, en los detalles de las cintas de sujeción muy anchas y también el sistema de cintas para ajustar la medida de la mochila a la espalda de cada corredor. Además de tener un compartimento principal donde podemos imaginar que nos va a caber todo el material que queramos, un compartimento para el sistema de agua con funda aislante y salida del tubo por el lateral y una goma en la parte inferior para llevar el cortavientos o los palos de forma transversal.
Como es una mochila chaleco, no dudamos nada en probarla. En un primer momento nos quedaba un poco grande (es talla única para chicos y chicas) pero ésta mochila Skin Pro 10 Set tiene un sistema de ajuste de tallas con cintas por la parte de arriba y de abajo de los laterales. Hay que tirar de los dos cordelitos que salen de la parte superior y las dos cintas que se tiran de la parte lateral inferior para ajustar la cintura y se va apretando. Lo pudimos hacer todo con la mochila puesta y es facilísimo, de esta forma la mochila quedó muy bien ajustada a nuestro torso y pudimos sentir lo cómoda que es, esta sensación de segunda piel que además evita que el contenido que llevemos en la mochila rebote; aunque para chicas o chicos de talla pequeña (S) nos queda un poco ancha en la parte del cuello y podría provocarnos rozaduras. Para reforzar aún más la sujeción, tiene, como ya vemos a menudo, dos cintas en la parte anterior, una a la altura del pecho y la otra por debajo. En ésta mochila son más anchas de lo normal y de goma elástica, para que podamos mantener una buena y libre respiración y no dificulte los movimientos en carrera. También se sujetan con unos clics más anchos de lo normal, como podemos ver en las fotos; Salomon dice que son para poder desatarlos bien con guantes y cuando nos la llevamos a esquiar pudimos probarlo y realmente se puede atar y desatar con guantes.
Nos gustó desde el primer momento tanto la comodidad como la ligereza de la Salomon Skin Pro 10 Set, que tiene un peso de 309g y a la vez de esta sensación de ligereza también la de frescor de toda la parte de la espalda y los laterales, todo el Mesh muy agujereado en toda la zona en contacto con el cuerpo que facilita la evacuación del sudor, consiguiendo que no se empape la mochila y acabe ganando peso.
Correr con mochila no es algo a lo que uno se habitúe fácilmente. No obstante, la evolución que han llevado en los últimos tiempos las mochilas de hidratación hace que cada vez sea más fácil acomodarse. La Kalenji Trail 9+14, gracias a su diseño en forma de chaleco, pertenece a esa clase de mochilas. Desde la primera toma de contacto resulta cómoda. Además, su ajuste es muy sencillo, lo cual es muy de agradecer. Dos cintas pectorales nos permiten situarla y ajustarla a nuestro pecho. A continuación, y tras ubicar bien la altura de los hombros, ajustaremos las cintas situadas bajo las axilas para acabar de "afinar". Ajustamos el tubo de hidratación (a izquierda o derecha, aquí cada uno carga hacía dónde crea conveniente) y listo. Rápido y fácil. Y cómodo: la espalda es de rejilla y las cintas de los hombros son sumamente finas por lo que todo resulta tremendamente minimalista y hace que su ajuste a la espalda sea bárbaro.