Järv Gaiter BUGrip GTX
Icebug
Salomon
Salomon S-Lab Ultra 3 - 2020
Dynafit
Dynafit Feline X7
Llega ese momento que tanto nos gusta, calzarnos unas zapatillas nuevas. Abrimos el BOA, un simple click hacia fuera, afloja el sistema y se abre toda la boca de la zapatilla. El pie entra solo de una manera muy suave. Un suave apriete, click, cerramos el BOA y basta dar unos giros para sentir como se aprieta la zapatilla de una manera uniforme. Giramos la rueda suavemente hasta que encontramos el punto de apriete que nos parece adecuada. Ya esta, que sencillo! Una vez puestas, es lo más parecido a llevar unos pies de gato para escalar. Mucho más ligeras de lo que aparenta un chasis tan rígido, El tallaje es pequeño comparado con la “media” y sientes como la zapatilla recoge el pie. Son unas zapatillas muy muy afiladas y eso se deja notar sobretodo en la zona del upper y en la zona de los dedos. Aparentemente no son muy cómodas, pero veremos que tal se portan con el paso de los kilómetros. Y la suela… ayyyy la suela. Dynafit ha apostado por la casa Vibram apra desarorllar la suela de esta zapatilla. La comparación es un tanto extraña, pero creedme que la sensación es muy parecida a llevar unos crampones para hielo. Uno se siente un tanto lejos o separado del suelo pero confiado de que llevas algo en los pies que te va a pegar al suelo siempre que lo necesites.
Autor: Marcel Palau, Javi Prieto
Fecha de publicación: 01/07/2015