Salomon Agile Belt VS Kalenji Cinturón 2 bidones

Agile Belt

Salomon

Salomon Agile Belt

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Primeras sensaciones y descripción

Todos los productos que hemos probado hasta ahora de Salomon transmiten desde el inicio muy buenas sensaciones y este Agile Belt no es una excepción. Ya en el primer vistazo nuestros ojos se fijan en infinidad de detalles (ripstop, tejido de los bolsillos elásticos, etc.) y en cuanto lo coges en las manos notamos su consistencia, buenos acabados, resistencia de las costuras, etc. No es una riñonerita chiquita sino que es un cinturón muy grande y casi parece más una mochila pequeña. De hecho, si la ponemos en vertical, no tiene nada que envidiar a algunas de las pequeñas mochilas que hemos probado. No tenemos la medición oficial de la capacidad de carga que tiene en litros pero estimamos que debe andar por encima de los tres litros y no le andará muy lejos a algunas de las mochilas de cinco litros que no tengan la posibilidad de ceder según se cargan. Aun así es bastante ligero y tan sólo nos ha marcado 140 gramos, que no está nada mal. El bolsillo principal es enorme, con doble cremallera y un bolsillito interior y en el exterior dispone de dos elásticos grandes y otros dos más pequeños que quedan en el lateral, casi en la parte delantera. Además tiene hasta siete tiras que se pueden usar para colgar lo que se quiera de ellas que, para más inri, son reflectantes así que también nos servirán como medidas de seguridad en nuestras salidas nocturnas. Salvo los bolsillos elásticos, que son del típico tejido elástico en todas direcciones que vemos habitualmente en los bolsillos de otras mochilas y cinturones de Salomon, el tejido es de RipStop e hidrófobo lo que nos hace sentirnos muy seguros de cara a pensar en él para salir a hacer nuestras burradas preferidas por el monte. El enganche no se realiza con una presilla sino que es una cinta ancha con un velcro que los de Annecy denominan Sensifit Belt y que al combinarlo con estructuras elásticas como los remates de los bordes del Agile Belt le dan un ajuste muy bueno. Podemos apretarlo a tope sin que nos sintamos oprimidos porque sentimos cómo cede mínimamente, algo que agradeceremos posteriormente en marcha, sobre todo cuando va muy cargado. La parte interior es tan buena o mejor que la exterior porque va toda recubierta con una rejilla de rombos que se encargará de absorber el sudor y hacer una capa intermedia por la que circulará el aire y que la humedad se vaya evaporando. Además tiene dos bandas de EVA agujereadas que apoyan en la zona de los riñones, a ambos lados de la columna vertebral para evitar que nos haga daño y que al estar agujereadas ayudan a que se creen canales de ventilación y se mejore la transpiración. Por si todo esto fuera poco viene equipado de serie con un Soft Flask de 500 mililitros, una de esas botellitas deformables que tan de moda se están poniendo de moda y que tan prácticas son porque según vamos gastando el líquido que contienen van reduciendo su volumen hasta quedar reducidas prácticamente a nada cuando están vacías. Después de manosearlo de arriba a abajo, por delante y por detrás durante unos diez minutos, no podemos resistir la tentación así que, llenamos el Soft Flask con agua fresquita, nos lo enrollamos en la cintura y apenas un minuto más tarde ya estamos saliendo por la puerta para hacer una primera salida con él a ver qué tal en marcha.

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Cinturón 2 bidones

Kalenji

Kalenji Cinturón 2 bidones

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Primeras sensaciones y descripción

Lo que primero nos llama la atención de este cinturón, es su elasticidad. Acostumbrados como estamos a modelos más rígidos, Kalenji nos sorprende con un modelo de gran elasticidad, compuesto de un 95% de poliéster y un 5% de poliamida. Incorpora varios bolsillos de fácil acceso en el lado derecho, que cierran con cremallera o velcro, para llevar el teléfono, geles, llaves, identificación e incluso un porta-dorsales. Además, consta de dos pequeños bidones de 115 mL que quedan firmemente fijados al cinturón mediante velcro. Como toda la parte externa del cinturón es de velcro, los botellines pueden colocarse prácticamente en cualquier posición, sin riesgo de perderlos. A la hora de ponérnoslo, de nuevo, queda claramente de manifiesto su elasticidad. El cinturón, que tiene una anchura uniforme de 7 cm, queda firmemente fijado mediante un velcro. Su ajuste es muy bueno y, gracias a su amplitud, no molesta, incluso aunque nos lo apretemos más de la cuenta. En la zona del bolsillo, lleva escrita la marca y el símbolo de la misma en material reflectante. El sistema de hidratación, como ya hemos comentado, consta de dos bidones de 115 mL autoadherentes mediante velcro. Van dentro de una funda elástica aunque, para su utilización, recomendamos nos sacarlos de la misma, ya que el velcro hace más fácil 'arrancarlos' y volverlos a colocar, que sacarlos y meterlos de la funda. La forma de los bidones es ergonómica para un buen agarre y la tapa para el rellenado va roscada. El diámetro de la boca de llenado es de 2,5 cm, por tanto no será una operación demasiado rápida si tenemos en cuenta que nuestro pulso en carrera puede no ser muy bueno. El cierre, es el habitual en este tipo de bidones así que, para beber, solo necesitamos subir la boquilla con los dientes. Para cerrar, se baja la boquilla de un golpe y el bidón queda perfectamente cerrado. No hemos observado pérdida de líquido ni con los cambios de presión.

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Autor: Morath (Rodrigo Borrego), Dani

Fecha de publicación: 05/06/2013