Construída al 100% en poliamida, la Gram Jacket de Haglöfs incorpora la membrana Active Shell de la marca GORE-TEX, el tejido más transpirable de la conocidísima marca de membranas, ideada para las actividades más intensas.
Es una chaqueta un tanto holgada, ya que no es elástica y debe ser capaz de cubrirnos con una primera y una segunda capa puestas. De todos modos, no es excesiva y es una chaqueta muy cómoda en la que no notamos que nos sobra tela en ningún lado. Sigue muy bien la forma del cuerpo.
Las mangas son también holgadas para darnos comodidad en cualquier movimiento que hagamos. Incluso en las subidas más duras, donde tiramos de los bastones a tope, no hemos notado tiranteces que nos impida un movimiento fluido.
La Gram Jacket de Haglöfs es una chaqueta que baja bastante. Depende de la altura de cada uno, claro, pero en mi caso llegaba justo hasta donde acaba el trasero, dando mucho margen para que no se suba y nos deje la parte baja de la espalda al aire, ni siquiera cuando estamos muy inclinados. Es muy desagradable que, manteniéndonos secos durante la carrera, nos entre agua por los riñones cuando nos inclinemos. Con la Gram Jacket, solucionado.
También incorpora en su interior un mosquetón a cada lado para cerrar la cintura y protegernos mejor de la lluvia pero sobre todo para evitar que el aire entre por ahí.
Los puños cierran muy suave en la muñeca, con una goma que no aprieta ni deja marca. Se puede extender sobre la mano, pasando los pulgares por unos agujeros. De esta forma nos cubre la mano hasta los nudillos manteniendo las manos calientes. Se hace muy desagradable correr con las manos frías y, si te has olvidado los guantes se agradece mucho poder disponer de este sistema. De hecho, incluso con guantes, los solemos utilizar.
El cuello es muy completo y cuando se cierra nos puede cubrir la boca sin problema. En la parte interior está protegido para evitarnos rozaduras en la zona del cuello. Cuando nos ponemos el gorro y lo ajustamos con los dos mosquetones que tenemos a los laterales, cierra muy bien sobre nuestra cabeza y cara, dejando pocos huecos. Además, en la parte trasera del gorro hay también una goma para acabar de ajustar fácilmente, con un único mosquetón, la capucha sobre nuestra cabeza.
La L.I.M. Proof Jacket de Haglöfs es lígera, tanto que puesta ni se nota. De corte holgado para evitar que el tacto habitualmente 'acartonado' de la membrana pueda resultar molesto, nos parece una chaqueta muy cómoda que, a primera vista, ya nos ha enamorado.
El cuello es bastante alto y nos cubrirá hasta la boca fácilmente si subimos totalmente la cremallera, protegiendo eficazmente de lluvia, viento o nieve. La capucha, que se ajusta mediante un dobladillo elástico al igual que las mangas y la cintura -sistema sencillo pero efectivo-, dispone además de visera lo que siempre es útil para proteger los ojos en caso de abundante agua. Cabe señalar que la capucha no puede plegarse y guardarse y dado su ligerísimo peso nos ofrece ciertas dudas pues, a primera vista, puede parecer que con el movimiento propio de carrera o por efecto de un fuerte viento vaya a estar traqueteando todo el tiempo.
Las mangas son, como hemos dicho, holgadas para favorecer nuestros movimientos y el elástico de los puños fija sin ceñir lo que permite, en caso de necesidad, subirlas hasta media manga sin dificultad.
La cintura es un par de dedos más larga en la parte posterior que en la anterior para evitar que la zona lumbar quede expuesta cuando realizamos ascensos.