Destacan, sólo verla, su cremallera de cuerpo entero, el cuello en semicisne y sus costuras, planas y bastante amplias, que la recorren siguiendo el contorno del cuerpo para facilitar así el ajuste y la movilidad. Vamos, que al verla podemos pensar cualquier cosa salvo que estamos ante una camiseta. Como decíamos, el primer vistazo nos llevará a conclusiones equivocadas. En alguna ocasión habíamos visto y analizado chaquetas con idéntica vocación de suplantar a las mochilas en nuestras tiradas más largas, dotadas para ello de gran cantidad de bolsillos. Sin embargo, no se trata de una chaqueta, con la diferencia de empaque y consistencia que ello puede suponer para la carga que queramos transportar. La primera duda, por tanto, ya está servida: ¿tendrá el peso y consistencia suficiente para no subirse y moverse constantemente por efecto de la carga y su peso?. La respuesta es que sí -luego matizaremos algunas cosas respecto de la carga-, pero lo cierto es que la camiseta no se mueve y resulta tremendamente cómoda. Se ciñe perfectamente al cuerpo sin sensación de compresión o ahogo.
Al ponérnosla comprobamos inmediatamente la gran capacidad con la que cuenta: dos bolsillos delanteros (para smartphone, geles, llaves, mp3, etc.) y dos bolsillos traseros (cada uno puede transportar un botellín de hasta 750 ml., además de braga, guantes, impermeable, frontal, manta térmica, etc.). Una auténtica barbaridad. La marca habla de una autonomía estimada con la WAA Ultra Carrier Shirt de 5 horas. Todo ello con un peso contenidísimo de 183 gr. El aspecto nos recuerda mucho a los maillot de ciclismo, tanto por la forma, el ajuste así como por la idea de poder transportar aquello que necesitemos con nosotros.
La BOYLSTON es estéticamente bastante austera. Unos detalles en rojo rompen su uniformidad y le dan un toque agresivo que la hace muy atractiva. Solamente con tocarla ya te das cuenta de que no es una camiseta normal. Su tacto es súper agradable, como si fuera de seda en lugar de poliéster.
Al ponérnosla por primera vez, lo primero que nos llama la atención es su ligereza (127 g, Talla M) y su comodidad. Al rato se te olvida que la llevas puesta. El detalle del agujero en las mangas para introducir los pulgares le da un toque 'profesional'. Si lo utilizas verás lo cómodo que resulta para correr, pues de esta forma, la manga te cubre prácticamente hasta los nudillos de la mano ahorrándote incluso, si el frío no es muy intenso, la necesidad de llevar guantes. Otro de los detalles que nos ha gustado es que en la parte posterior es sensiblemente más larga para que no se nos suba y proteger así la zona de los riñones.
