La Trangoworld Kuhan está fabricada en poliamida (44 %), poliéster (30 %) y elastano (26 %), bajo el sello, como ya dijimos, de Gore-Tex Active. Aunque el ruido que hace la membrana al moverla nos hace recordar inmediatamente al plástico (detalle muy típico en este tipo de prendas), su tacto es de los más suaves que hemos probado: los dedos deslizan suavemente por la chaqueta sin que encontremos rugosidades o una superficie irregular. Notamos también que a pesar de la envergadura que a primera vista tiene la chaqueta, ésta se deja moldear sin mucha resistencia.
La amplitud del fit en general nos ha permitido llevarla como tercera capa e incluso con chaleco de hidratación en el interior, con lo que esto os puede dar una idea aproximada de la comodidad que proporciona; bastante amplia y cómoda sí, pero sin llegar a tener aquella sensación de que nos estamos poniendo una prenda de tres tallas más grandes que la nuestra
Los puños son ajustables con velcro, de manera que podemos escoger la medida exacta de sujeción que en cada momento necesitemos (si llevamos guantes o no
); una vez cerrados, no entra ni una gota de agua / nieve o viento: ¡nada!
El conjunto formado por el cuello + gorro de la Trangoworld Kuhan es sencillamente extraordinario. Veamos: el cuello, cerrado hasta el tope (gracias a un doble ceñidor facial), nos llega por debajo de la nariz y gracias a la tela interior, nos hemos olvidado de roces, tiranteces o rojez en la piel que en muchos casos suelen ocasionarnos aquellas chaquetas que no llevan protección. En nuestro caso, nada de nada, incluso en temperaturas frías por debajo de 0 ºC (que es cuando todo nos hace más pupita). Pero si además nos ponemos el gorro y nos lo ajustamos al tope, le protección que obtenemos frente a los elementos es difícil de mejorar, ya que solamente nos deja al descubierto una superficie muy reducida de nuestra cara: una estrecha ventana en donde solo asoman nariz y ojos, siendo la guinda del pastel la visera del gorro, que en caso de lluvia o nieve nos proporcionará un plus de protección y sequedad, además de evitarnos que los elementos nos caigan directamente en la cara. Con esto ya os podéis percatar que la membrana KUHAN está pensada para condiciones climatológicas comprometidas. Y si no sopla demasiado viento, podremos cerrar el gorro y enrollarlo en nuestro cogote gracias a la cinta con velcro que lleva a tal efecto, consiguiendo así varias cosas: - que no rebote mientras corremos; - que no se produzca el efecto paracaídas (que se infle de viento por no poder cerrarlo); y, - con el cuello cerrado hasta arriba, tendremos una especie de braga que nos protegerá todo el perímetro del cuello. Sencillo pero realmente funcional. ¡Bravo!
La cintura también es ajustable gracias a un elástico con cierre de tanca: muy manejable y fácil de manipular incluso si llevamos guantes gruesos. Y como no podía ser de otra manera, la parte posterior de la membrana es más larga que la delantera, de manera que nos protege las lumbares en subidas pronunciadas o pasos comprometidos.
Cuando vemos la Eider Uphill nos fijamos en su diseño, muy contundente, muy de chaqueta para deportes de alta montaña. Hoy la vamos a usar lejos de ese hábitat. Las cremalleras forman parte de su diseño, de paso ancho y carro pequeño. Muy presentes en toda la chaqueta. Velcros para cerrar los puños y una cremallera en las axilas para favorecer la transpiración. Todo rematado con un gorro para poder protegernos de todos los elementos meteorológicos.
Una vez puesta es cuando seguimos descubriendo la Eider Uphill, con un tacto menos "acartonado" que muchas de sus competidoras, la membrana Neoshell no tiene el tacto tan plástico, y se deja notar solo ponérnosla. Lo primero que vemos es una chaqueta con un corte más desahogado, siendo más ancha en la zona del pecho y sobretodo en la parte inferior, donde la chaqueta se abre. Las mangas son anchas pensadas para poder llevar una primera capa e incluso una segunda.
El gorro también es ancho al igual que la apertura para la cara. Todo estos puntos podemos cerrarlos con un velcro en la zona de las mangas, o con mosquetones en la parte inferior, o el gorro.
La Eider Uphill esta diseñada para días fríos, más que días, en este caso podemos hablar de grados de temperatura, por debajo de los 5 grados es cuando más rendimiento le sacaremos. Sobretodo para días lluviosos o que nieve.
Todo el diseño de la chaqueta es ancho, pensada para favorecer los movimientos una vez estamos en plena actividad física y no notar tiranteces. Las mangas son completas y desahogadas con una cierre en la muñeca amplio, por si queremos llevar guantes, poder cerrar encima de ellos. La parte inferior de la chaqueta también es ancha, con la posibilidad de poder ajustarla con unos mosquetones y un cordino para que no entre aire o el frio. El gorro también es ancho y podemos ajustarlo con tres mosquetones, dos a cada lado de la cara y uno en la parte posterior para cerrar y evitar que se mueva. Además, el gorro, incorpora una visera con un alambre interno para poder dejar la posición que deseemos. Es un detalle realmente útil en días de lluvias donde podemos ajustar la visera para no mojarnos en función de si el agua nos viene más de un lado, de frente... y realmente se queda en esa posición.
El cuello es bastante alto y ancho, cubriéndonos la boca con facilidad pero dejando espacios para la transpiración, siempre en el caso que no cerremos con los mosquetones.