The North Face Eat My Dust Shorts W son los pantalones entre pantalones, de hecho, cuando los vemos por primera vez entre otros modelos de otras marcas, nos llama la atención. Cabe decir que mucho tiene que ver en esto su llamativo color verde y naranja fosforito, pero es cierto que la mayoría de la veces miramos con las manos, es decir...tocamos, y la suavidad y ligereza de este short, nos cautiva desde el primer segundo.
Se trata de un pantalón corto, holgado en la zona de la pierna y con una cintura de malla ancha de un llamativo color naranja fosforito, igual que las costuras y el fino contorno de reborde final de la pierna. En ambos laterales cuenta con un panel de ventilación, en su interior tiene un forro de protección y en la zona trasera un bolsillo con cremallera.
Nos despierta curiosidad la malla ancha de la cintura, y con el típico ¿aguantará? decidimos probarnos estos pantalones The North Face Eat My Dust W. "Más que agradable" es la sensación que nos llevamos en nuestra primera prueba, decir que es cómodo es poco, y es que si cerramos los ojos, ni notamos que lo llevamos. Esta grata sensación de confort se debe en gran parte a su composición. El tejido está compuesto por diferentes porcentajes de poliéster y elastano en función de la parte del pantalón, siendo un 86% poliéster y 16% elastano en el cuerpo, un 90% poliéster y un 10% elastano trazado en tejido de malla en el panel de la cintura, y un 100% poliéster con un tejido entrelazado en la parte del forro. Esta composición diferencial permite potenciar las diferentes funciones de cada parte, consiguiendo un secado rápido y gestionando la humedad del clima, manteniendo una buena elasticidad que nos permita funcionar libremente, y cuidando la comodidad interior con la máxima suavidad.
Con sólo 235 gramos The North Face Eat My Dust W nos transmite libertad de movimiento en las piernas y sin ningún tipo de presión en la cintura. Es fresco, ligero y confortable, y con estás cualidades, despierta nuestras ganas de probarlos en carrera.
Hemos recibido para realizar el test los Patagonia Trail Chaser en gris oscuro en combinación con inserciones más claras en los laterales de los muslos, entrepierna y parte superior del glúteo. Estas inserciones son de rejilla y ayudan a que quede una prenda mucho más atractiva además de transpirable. Dos pequeños cortes diagonales a la altura de la ingle dejan intuir dos bolsillos grandes. Nos gustan, son unos pantalones cortos poco llamativos y con todo lo necesario para poder disfrutar de buenas tiradas de Trail Running.
Una vez puesto el Trail Chaser consigue que nos sintamos muy cómodo, el tacto es agradable al contacto con la piel. Es un pantalón es de corte desahogado, no produce tiranteces y ofrece muy buena libertad de movimiento. Podemos subir y bajar la pierna sin problemas, saltar piedras o grimpar rocas sin problemas
En cuanto a peso los pantalones podemos englobarlos dentro de un rango medio, los bolsillos y algunos detalles hacen que los Patagonia Trail Chaser sean algo más pesados.