AZTEC LITE

Solo poner el pie en el interior de la Aztec Lite ya sirve para darte cuenta de que se trata de una zapatilla muy cómoda y que, la sensación de que se trata de una zapatilla muy pesada, es más visual que real, ya que, puesta en el pie, no resulta en absoluto pesada. El pie entra en la zapatilla sin dificultad, gracias a su horma más bien amplia, pero queda muy bien sujeto al tensar los cordones, que por cierto son de lazada rápida, tipo cable con zip. Sin embargo, permiten bastante movimiento en la parte delantera, mejorando la propiocepción respecto al terreno y evitando las molestias que nos pueda ocasionar la inflamación de los dedos en caso de llevar muchas horas de carrera.
A continuación pasaremos a analizar las diferentes partes de la zapatilla con más detalle, desde las experiencias recogidas después de más de 300 km de rodaje por diferentes terrenos, desde los senderos más técnicos y con fuertes desniveles, hasta las pistas más sencillas y prácticamente planas.

Resulta anecdótico decir que la firma americana Scott nació en 1958 cuando Ed Scott, ingeniero y esquiador, inventó unos bastones de aluminio que revolucionaron el mundo del esquí. Sin embargo, esa seña de identidad que es la innovación, se ha mantenido como ADN de la marca americana extendiéndose a deportes tan diversos como es el ciclismo, el motociclismo y, más recientemente, el trail running. Quizás debido a su reciente entrada en el trail running, Scott es menos conocida en nuestro deporte que en el ciclismo o el esquí, pero una garantía de su buen hacer queda de manifiesto cuando vemos que un corredor como Marco De Gasperi es su corredor franquicia, uno de los pocos corredores capaces de ganar al mismísimo Kilian Jornet.
En esta ocasión vamos a analizar las Scott Aztec Lite, unas zapatillas polivalentes, de la colección FW2013, que según la división de Scott Running, ha sido diseñada tanto para los trails más duros, como para nuestras caminatas de montaña más lights. Entre sus principales características destacan una suela exclusiva diseñada por Vibram, el sistema eRide, que favorece una pisada más eficiente, la geometría del talón, que mejora la estabilidad en los descensos, un sistema de lazado rápido y un upper que con el sistema Ergologic Fit ejerce una buena sujeción sobre nuestro pie. Además, la marca norteamericana ha aligerado peso respecto a su antecesora la Scott Aztec.
La primera impresión que dan es la de ser unas zapatillas muy robustas, por no decir un poco ‘torpes’, quizás más por su aspecto que por su peso pues, aunque no se trata de una zapatilla de gama ligera, tampoco podemos decir que sean muy pesados (391 g, 10.5 USA). De hecho, como veremos más adelante, las primeras impresiones a veces no son las que cuentan. Lo que más nos ha llamado la atención es la forma de la suela, que es totalmente plana, cuando normalmente estamos acostumbrados a que las bambas tengan una ligera curvatura bajo el arco plantar. La suela fabricada por Vibram se ve muy contundente, con muchos tacos de grosor medio, y, la zapatilla en sí, da impresión de tener una gran durabilidad.
Su diseño en rojo con termosellados y protecciones en negro y algún detalle en amarillo, nos ha parecido muy atractivo. Es una zapatilla llamativa, de esas que no pasan desapercibidas. Pero independientemente del diseño, ahora lo más importante es calzárnoslas y ver qué sensaciones nos transmiten.

La Aztec Lite es una zapatilla de trail running con una media suela de perfil medio, que proporciona una buena amortiguación, pero que cuya flexibilidad está bastante limitada por la dureza de la suela, en la cual no hay ninguna zona destinada a facilitar la flexión. Por tanto, podemos decir que las Aztec Lite flexan poco y exclusivamente en la zona de los metatarsos, debido principalmente a un menos grosor de la media suela en este punto.
Posee la tecnología eRide, que es lo que le da a la zapatilla esta forma tan característica plana, sin la curva en la parte central del pie, y que nos ha llamado la atención desde el inicio. La horma simula un balancín, quedando la zona media del pie y el talón en contacto con el suelo y la parte de los metatarsos y dedos ligeramente elevada (lo que denominaríamos un rocker elevado). Esta forma tan peculiar consigue que, por un lado, la estabilidad del aterrizaje en cada zancada sea mejor, y por otro lado, que la transición entre el aterrizaje y el despegue sea más natural produciéndose una menor disipación de la energía y, por tanto, una menor pérdida de velocidad. En un sentido más práctico, podemos decir que todas estas ventajas las hemos experimentado corriendo sobre todo en terrenos poco técnicos y sin demasiada inclinación. Realmente, la Aztec Lite invita a aterrizar con el talón, en donde la amortiguación es excelente, y si que hemos notado que facilita mucho la transición hacia los metatarsos para impulsarnos en la siguiente zancada. Es como si te permitieran correr más con menos esfuerzo. Sin embargo, cuando nos hemos enfrentado a terrenos muy técnicos, hemos echado de menos una mayor facilidad de flexión de la suela, tanto longitudinal como transversal, para poder adaptarnos mejor al terreno y ganar en grip y estabilidad en la pisada.
La media suela está fabricada en AeroFoam, un material un 25% más ligero que el EVA y que nos proporciona una buena amortiguación (un 50% mejor según Scott) y que, en teoría, se deforma un 5% menos a largo plazo. Objetivamente, e independientemente de lo que diga la marca, lo que tenemos es una zapatilla con una muy buena amortiguación, mejor en la parte del talón que en el antepié. Sin embargo, puesto que gracias al sistema eRide estamos ante una zapatilla que podríamos denominar como ‘anti minimalista’, es decir, pensada para aterrizar con la parte trasera, consideramos que la amortiguación delantera es más que suficiente. En general se trata de una amortiguación blanda, que absorbe muy bien los impactos de objetos punzantes gracias a su capacidad para deformarse. Los perfiles son medios, obviamente más alto el trasero que el delantero, de forma que el drop es de 11 mm, por tanto no requieren ningún tipo de adaptación.
La sensibilidad que conseguimos respecto al terreno no es demasiado buena, quizás no tanto debido a la media suela como a la dureza y rigidez de la suela. Pero bueno, tampoco esperábamos demasiado en este sentido de una zapatilla con estas características. La ventaja de esto es que el pie queda muy protegido respecto a objetos punzantes como piedras, rocas, raíces, etc. Por tanto, es una zapatilla que te puede ir muy bien si tienes problemas en las plantas de los pies. La protección ofrecida por las Aztec Lite es excelente.

La lengüeta de las Aztec Lite forma una especie de botín con el upper, ya que va perfectamente cosida al mismo, evitando de esta forma la entrada al interior de cualquier tipo de objeto extraño. Es de tamaño medio y no demasiado gruesa. En la parte superior externa, lleva un refuerzo en amarillo bastante duro, que evita que el tensor de los cordones se nos clave en el empeine durante la carrera. A pesar de su moderado grosor, no hemos experimentado ningún tipo de molestia en el empeine, ni en las bajadas más técnicas e impide perfectamente la entrada de piedras o arena hacia el interior.

Los cordones son de lazada rápida, tipo cable con zip, muy conocidos en el mundo del trail running gracias a otras marcas que ya llevan mucho tiempo utilizándolos. Como no van atados mediante un lazo tradicional, no se pueden soltar y el zip, que corre muy bien y no se afloja con el paso de los kilómetros, nos permite dejar cordadas las bambas en cuestión de segundos. Hay una goma situada en la parte central de la lengüeta para sujetar la parte sobrante del cable, sin embargo, puesto que la parte sobrante es bastante larga, os recomendamos que, además de pasarla a través de dicha goma, la liguéis también con la parte inferior de los mismos cordones, ya que si no el balanceo acaba resultando molesto.
La sujeción del pie dentro de la zapatilla es muy buena, sobre todo en la zona del empeine, gracias a la tecnología Ergologic Fit. El upper está dividido en dos partes, por un lado el botín que forma la parte delantera junto con la lengüeta, y por otro, la zona del talón que se extiende hasta la zona media en forma de dos paneles laterales con refuerzos termosellados, donde quedan asentados los ojales de los cordones. Es gracias a estos paneles laterales que al tensar los cordones el empeine queda abrazado por ellos ofreciendo una buena sensación de estabilidad y confort en la zona central del pie.
El upper, construido a base de material sintético, es transpirable y poco elástico. Al ser la horma bastante amplia, permite bastante libertad de movimiento en la zona de los dedos. La zona del talón tiene un chasis muy rígido, aunque con acolchados, que hacen que el talón quede perfectamente encajado en su posición. Es de caña alta en la parte trasera aunque baja bastante en la parte lateral, dejando los tobillos a la vista, para permitir una mejor libertad de movimiento y evitar la aparición de rozaduras. Con todo ello, consideramos que la estabilidad del pie dentro de la zapatilla es muy buena, incluso en los pasos laterales y bajadas, que suelen ser las situaciones más comprometidas. No hemos notado que el pie se desplace lo más mínimo en ninguna de las situaciones experimentadas.
La Aztec Lite es una zapatilla neutra, es decir, no lleva ningún tipo de control de pisada. Sobre terrenos poco técnicos se comporta perfectamente, independientemente de que sean subida, bajada o flanqueos. Es quizás en las zonas más abruptas donde hemos echado de menos un poco más de flexibilidad para conseguir una mejor adaptación a las irregularidades que nos vamos encontrando.

Los acabados de la Aztec Lite son buenísimos. Se nota que es una zapatilla de gama alta y es que han cuidado todos los detalles. Los termosellados son de muy buena calidad y en el interior de la zapatilla no hay costuras susceptibles de provocarnos rozaduras, pues el pie queda muy protegido por el botín que forma el upper junto con la lengüeta. Además, aunque la zona del talón es muy rígida, unos generosos acolchados en el collar superior acomodan nuestro pie en el interior de la zapatilla y nos protegen.
Las protecciones son muy buenas, sobretodo en la parte delantera y trasera. Las de la parte delantera están fabricadas es un materia textil, una especie de cordura de poliéster, que tiene muy buena resistencia sin ser demasiado rígida. Sin embargo la protección de la parte trasera viene dada por el chasis interior del talón. Todas estas protecciones harán que nos sintamos muy seguros con las Aztec Lite, pero comprometen en cierta manera su ligereza.
La plantilla, que es bastante fina en la parte delantera y no tanto en la trasera, está fabricada en dos densidades. Por un lado, la zona en contacto con el pie es de un material esponjoso de grosor medio que ayuda a la absorción de los impactos. En la zona del talón y media del pie, un material más consistente ayuda a mantener la forma envolvente de la parte trasera de la plantilla, de forma que el pie queda perfectamente colocado dentro de la zapatilla. Últimamente nos ha dado por probar la capacidad de amortiguación de las plantillas y para ello lo que hacemos es salir a dar un par de vueltas, una de ellas con plantillas y la otra sin plantillas, ya que es la mejor forma de notar la diferencia. El resultado con las Scott es que no hemos notado una gran diferencia en cuanto a amortiguación, probablemente debido a que la robustez de la suela ya nos aísla suficientemente de las irregularidades del terreno. Lo que sí que mejora claramente con la plantilla es la colocación del pie en el interior de la zapatilla, impidiendo el deslizamiento del mismo.
Un detalle que nos ha gustado mucho es la presencia de unos ‘mini tacos’ en la parte inferior de la plantilla que impiden que ésta se desplace durante las bajadas. Seguro que no es la primera vez que corréis en mojado y acabáis con un pliegue en la plantilla bajo los dedos! Pues estos tacos funcionan perfectamente para impedir este desplazamiento.
No hemos encontrado información acerca de si la plantilla posee tratamiento bactericida o no, así que nos vamos a centrar en nuestra experiencia y podemos decir que, después de más de 300 km, no huelen.
Parece que las Aztec Lite llevan unos pequeños puntos reflectantes tanto en la parte trasera como en la delantera pero, siendo tan pequeños, su efectividad es prácticamente nula. Así que si tenéis pensado salir a correr por la noche, no os olvidéis llevar alguna prenda con algún material reflectante de mayor tamaño.

Como buena zapatilla de trail running, versátil y para cualquier estación, la Aztec Lite no es impermeable. El mesh transpirable es una puerta abierta para la entrada del agua, de forma que aguanta una lluvia ligera pero si cruzas un río o pisas un charco, el pie acabará mojado. Además, debido a las protecciones y termosellados que rodean la parte baja de la zapatilla, el agua tarda en salir y se secan muy lentamente.
La transpirabilidad del mesh es buena pero los refuerzos y termosellados también hacen que la superficie transpirable no sea demasiado grande y por tanto, en conjunto, el balance no es demasiado bueno. Si tienes grandes problemas de sudoración, mejor no utilices esta bamba en las épocas más calurosas del año.

La suela de estas Scott ha sido fabricado por Vibram exclusivamente en material Supertrek, una especie de caucho que combina buena adherencia y durabilidad. Los tacos son direccionales de tamaño medio y muy numerosos. Los del antepié están colocados de forma que favorecen la tracción hacia adelante mientras que en la parte trasera van en sentido contrario para facilitar el frenado en los descensos. Además, una especie de espolón trasero que sobresale sobre la vertical del talón aumenta la superficie de contacto durante el aterrizaje en los descensos mejorando la estabilidad.
Sobre tierra, tanto dura como descompuesta, el grip es muy bueno, tanto en subida como en bajada. Seguramente es el terreno en el que las Aztec Lite se sienten más cómodas. Las prestaciones disminuyen notablemente en terrenos mojados y muy deslizantes. Sobre todo en rocas y losas mojadas con poca fricción en las que la suela resbala bastante habiéndonos llevado más de un susto. Sin embargo, si las rocas están secas, de nuevo el comportamiento es muy bueno, aunque debido a la dureza y poca flexibilidad de la suela, la superficie de contacto no acaba de ser demasiado grande y se ha de tener una buena técnica. En pasos laterales y canteos, la tracción es buena en terrenos poco técnicos gracias a los tacos multidireccionales aunque, de nuevo en terrenos más técnicos, nos ha parecido excesiva la rigidez de la suela. En terrenos grasos como hierba mojada o barro, el comportamiento es aceptable. En hierba la adherencia tanto en subida como en bajada es buena. Creemos que gracias al espolón trasero, que actúa como un ancla, nos hemos evitado más de un patinazo. En barro la adherencia es buena siempre que no sea un barro muy pegajoso, porque si lo es, se acaban formando ‘panes’ de barro en las suelas y acabamos perdiendo la adherencia por completo. Este efecto es probablemente debido a la gran cantidad de tacos que dificulta mucho la expulsión del barro.

Al tratarse de una zapatilla tan robusta y con una suela tan dura, lo que tenemos garantizada es la durabilidad. La suela y el upper, después de 300 km están prácticamente inalterados. Quizás la plantilla parece el punto más débil ya que en la parte del dedo gordo, se aprecia cierto desgaste. En cualquier caso, la plantilla siempre se puede cambiar y la bamba queda como nueva.

Así pues, para concluir haremos un pequeño resumen de los principales detalles observados durante las pruebas.
Como parte positiva destacaríamos la buenísima amortiguación y protección que ofrecen, así como lo bien que funciona el sistema eRide en los terrenos menos técnicos, facilitándonos la transición aterrizaje-despegue.
En la parte negativa situaríamos la dureza de la suela, la moderada transpirabilidad y la mala adherencia en roca mojada.
Scott, como firma americana que es, ha hecho una zapatilla ideal para terrenos poco técnicos, podríamos decir pisteros, en los que el sistema eRide manifiesta todo su potencial. Para corredores neutros de peso medio o alto es una elección perfecta gracias a su buena amortiguación. Se pueden emplear en cualquier distancia aunque, puesto que no es una zapatilla muy ligera, mejor emplearla en entrenos y carreras de larga distancia en las que primaremos la protección de nuestros pesos respecto a esos 100 g de más o de menos. El precio nos parece muy acorde a la calidad de la zapatilla y a la durabilidad que nos ofrece.