RC PRO TR' 4

SCOTT

GALERÍA

DATOS TÉCNICOS

  • Peso 130 g
  • Precio 129,90 €
  • Temporada SS25
  • Capacidad 4.0 litros

CONCLUSIONES

Pros & Contras

Mochila versátil.
4 litros que parecen más.
Transpirable y de secado rápido.
La Scott RC PRO TR’ 4 ocupa como un puño.



PROS: 

- Comodidad por los cuatro costados

- 4 litros de volumen que parecen mucho más.

- Transpirabilidad y secado rápido.

- Sistema cómodo para transportar los bastones.


CONTRAS:

- Los bidones tienen algo de rebote cuando la mochila va vacía.

- Cuesta abrir los bolsillos laterales cuando están vacíos; no hubiera estado demás un pequeño tirador.

Conclusión

Un tejido de calidad.
Funcionalidad excelente.
La Scott RC PRO TR’ 4 es minimalista.
Rozando la perfección.



Scott nos presenta su nueva mochila de hidratación, la Scott RC PRO TR’ 4, que se renueva completamente para ofrecernos una pieza premium donde sus cualidades más evidentes son la calidad del tejido, el  confort y la funcionalidad.

De peso reducido (tan solo 130g) y 4 litros de capacidad pero que, gracias a su variedad de bolsillos elásticos, parecen mucho más, ya que permite llevar todo lo que sea necesario u obligatorio en competición; de hecho, tiene capacidad de sobras para portear todo lo obligatorio en una carrera de larga distancia.

Portabidones con sujeción, bolsillos delanteros con cremallera, bolsillos elásticos, bolsillos laterales que recorren el perímetro y el compartimento trasero, también elástico. Además, silbato de seguridad escondida en el asa, pasadores frontales para llevar los bastones verticalmente y la posibilidad de adquirir aparte el carcaj de la marca, ya que viene provista con los enganches a tal efecto. Y por último, dos bidones blandos de serie de 500 m cada uno. Como veis, no le falta de nada.

En carrera es un lujo llevarla puesta, ya sea a carga completa o prácticamente vacía, ya que se adhiere el contorno corporal de manera exquisita. El rebote es prácticamente inexistente, tanto en la zona delantera como trasera (solamente se puede apreciar un mínimo rebote si llevamos como carga total, los bidones de hidratación, y ello solamente cuando están recién llenados).

Proporciona espacio suficiente para tener a mano los elementos más recurrentes en nuestras competiciones (barritas, geles, móvil, frontal, guantes, etc...), gracias a la variedad de bolsillos elásticos que hay en la zona delantera. En la parte posterior, dos compartimentos más permiten introducir las piezas más grandes que necesitemos (térmica, membrana, gorro...)

En definitiva, una mochila de hidratación de casi roza la perfección en cuanto a comodidad y funcionalidad.


REVIEW

Sistemas de hidratación

"Con dos bidones de 500 ml de serie."
La Scott RC PRO TR’ 4 lleva la hidratación en los bolsillos delanteros.
Con dos bidones de 500ml de serie.
Existe algo de rebote cuando llevamos los bidones llenos y la mochila vacía.
Bidones de fácil acceso.

Sistemas de hidratación

"Con dos bidones de 500 ml de serie."



La Scott RC PRO TR’ 4 trae de serie dos bidones blandos de 500 ml cada uno. Hydrapack es la marca que hay detrás (como en casi la práctica totalidad de bidones blandos del mercado), con lo que tendremos un plus de confianza en su resultado a futuro.

La boca, o rosca, es lo suficiente grande como para meter pastillas de sal o electrolitos sin necesidad de partirlos; también son perfectas para recargarlas de líquido en fuentes o avituallamientos, ya que no debe hacerse tanta puntería.

El pico es blando y gustoso al tacto, y si presionamos el bidón, el líquido ya sale.

Resulta fácil  introducirlos en el bolsillo aun cuando los acabamos de cargar de agua, gracias a que éste no es exageradamente estrecho y a la base en forma de punta del bidón en sí, que ayuda para llegar hasta el fondo del bolsillo.

En carrera, hidratarse es tarea bien sencilla: solo debemos acercar al bidón a la boca y bajar algo la cabeza, al tiempo que lo presionamos. Y decir que, por el tamaño del bolsillo, solo acepta bidones de estas medidas.

Si quitamos el aire de los bidones, el rebote del líquido en su interior será realmente mínimo, por no decir inexistente, de manera que en ningún momento hemos llegado a tener molestias en este sentido. No obstante, cuando la mochila va bien cargada (por la zona trasera y laterales), el rebote delantero sí desaparece del todo, ya que el conjunto queda más apretado, minimizando cualquier indicio de rebote o salto.

El acceso a los bidones es igualmente fácil aun transportando los bastones.

En el bolsillo que se ubica por debajo del principal (en la zona trasera), podríamos incluir una bolsa de hidratación (mejor si tiene forma alargada), si ella fuera necesario, haciendo llegar el tubo a la boca a través de los pasadores de los bastones, por ejemplo. No es que tal bolsillo esté preparado para ello, pero si sabemos de antemano que nos resultará difícil conseguir agua, se podría contemplar dicha opción. No obstante, es una mochila pensada para competición, donde se supone que vamos a estar surtidos de varios avituallamientos.

Compartimentos y extras

"Número de bolsillos exactos para no volvernos locos."
La mayoría de la carga va en los bolsillos traseros.
La Scott RC PRO TR' 4 está llena de bolsillos.
Mochila muy cómoda en carrera.
Con bolsillos de fácil acceso en carrera.

Compartimentos y extras

"Número de bolsillos exactos para no volvernos locos."



En cada zona pectoral de la Scott RC PRO TR’ 4 hay tres bolsillos: uno de rejilla para el bidón blando (que lleva un pasador para fijarlo y no se vaya hacia el fondo), y uno por debajo de aquel que podríamos decir que se convierten en dos, ya que el acceso al vertical con cremallera comparten “espacio”. Todos ellos elásticos, para retener la carga que queramos o necesitemos llevar. El acceso a ellos es simple y rápido, y podemos introducir elementos como barritas, geles, una badana, móvil, etc... Es decir, cosas de uso recurrente en la competición.

El bolsillo situado más abajo llega hasta la mitad de nuestro lateral. 

En la zona trasera tenemos el bolsillo principal, que por su capacidad, es donde podremos introducir el mayor número de elementos. No tiene cierre especial, pero al ajustarnos la mochila, este se acopla a la espalda y queda presionado (cerrando así la zona de apertura), con lo que nada va a salir volando. La zona en contacto con el cuerpo es de rejilla para maximizar la circulación de aire, con lo que siempre intentaremos poner ahí piezas de ropa o similar, y no elementos punzantes o duros, ya que molestarían en la espalda cuando estemos corriendo. Si lo que necesitamos sacar está en lo alto del bolsillo, podremos hacerlo tranquilamente, pero para volverlo a meter o buscar otra cosa más abajo, es preceptivo quitarse la mochila.

Por debajo de este, hay otro bolsillo perimetral, al que podemos acceder tanto por nuestro costado derecho o izquierdo, ya que se trata del mismo compartimento. Si tenemos que extraer algo, el acceso es fácil, ya que al estar algo abierto, pinzamos con dos dedos lo que necesitemos y ya está; en cambio, si de lo que se trata es de meter algo cuándo este va vació, la tarea se hace más complicada, porque cuesta abrir el bolsillo (al ir la abertura tan pegada al cuerpo). Lo ideal hubiera sido colocar un pequeño tirador.... (tarea que se convierte en imposible si llevamos guantes, obviamente). 

Existen dos sistemas para transportar los bastones. El primero sería adquirir el carcaj  de la marca (hemos probado de otra marca diferente y no encajan), que no viene de serie con la mochila.

El segundo, los pasadores en cada asa que hay al efecto para llevar los bastones longitudinalmente; el pasador situado más arriba tiene una tanca para ajustar y cerrar, pero el de abajo, solo es una goma sin posibilidad de ajuste. Al principio creímos que sería bueno que este pasador también tuviera cierre, pero las pruebas han demostrado lo contrario, ya que  no hemos notado que fuera necesario. El cierre del de arriba es suficiente para que los bastones no vayan deslizándose hacia abajo, incluso en bajadas muy rápidas. Ahora bien, para evitar el rebote de los bastones contar el cuerpo (en la zona del hombro), lo mejor es poner la empuñadura abajo y las puntas arriba, aunque no sea lo más adecuado, ya que si hay alguna caída, no hace mucha gracia esa posición... Así puestos, el rebote es inexistente y no molestan en absoluto, ni incluso para beber de los bidones. Además, tanto quitarnos como ponerlos es una tarea verdaderamente rápida y fácil.

El silbato de emergencia se aloja escondido en un borde del asa derecha, y la mochila tiene efectos reflectantes para las situaciones de poca luz.

En carrera

"Ajuste y comodidad a la altura de las expectativas."
Mochila para disfrutar.
Un modelo encarado a la competición.
Ajuste y comodidad a la altura de las expectativas.
La Scott RC PRO TR' 4 no decepciona.

En carrera

"Ajuste y comodidad a la altura de las expectativas."



Desde luego que la Scott RC PRO TR’ 4 está pensada para servir al máximo en días de competición, gracias a su buen ajuste, peso y comodidad. De hecho, habrá muchos momentos en que no recordarás llevarla puesta.

Poco a ver tiene el terreno por dónde pasemos, ya que actúa de la misma manera en todos ellos, incluso si debemos saltar, bajar rápido, atarnos los cordones o incluso grimpar; siempre tenemos libertad plena de movimientos.

En nuestro caso, dada la configuración de nuestro contorno corporal e incuso usando la talla correcta, hemos notado rebote “cero” de los bidones solo cuando el bolsillo trasero va con bien cargado, ya que este hecho provoca un ajuste total que compensa la carga delantera cuando los bidones van llenos de líquido. En otros casos, si solo llevamos carga delantera (bidones llenos), sí que hay un cierto rebote de la misma a ritmos altos. No obstante, cuando los bidones ya van por la mitad de contenido, el rebote desaparece.

Lo que no tiene rebote en absoluto es la zona trasera, ni aun cuando va cargada al 100% de su capacidad; en este sentido, su ajuste y sistema de cierra cumplen con su función a la perfección.

Otro elemento a tener en cuenta es que aunque tensemos la sujeción con fuerza, las asas en zona de hombros o laterales no agobia ni molesta, y ajusta con firmeza sin dolor (hay mochilas que si ajustamos con fuerza, tienden a hacer daño al cabo de un rato corriendo...).

El tejido con el que está hecha (poliamida, elastano y poliéster, según la zona), permite dos cosas: una buena entrada del aire y una evacuación del sudor rápida. Ahora bien, es la zona de la espalda donde más le cuesta realizar dicha evacuación, ya que por razones obvias, va en contacto directo con la espalada, y si a eso le sumamos el bolsillo cargado con ropa (una membrana, térmica fina, etc...), la acumulación del calor puede ser mayor. En cambio, cuando el compartimento va casi vacío, confirmamos que esa zona no se va a recalentar en exceso, permitiendo que nuestra salida sea plácida en ese sentido.

Ninguna parte del chaleco es impermeable ni tampoco hay bolsillos estancos, de manera que si sudamos mucho o hace mucho calor en la salida, los elementos que transportemos pueden se verán impregnados de humedad. De hecho, al finalizar las salidas, la carga estaba notablemente húmeda, sobre todo aquellas prendas -dentro del chaleco-, más cercanas la cuerpo.

Resistencia / durabilidad

"A pesar de su tejido, soporta muy bien las salidas."
Tejido de calidad.
La Scott RC PRO TR' 4 sigue en buen estado.
Los tejidos son duraderos.
El conjunto soporta bien las salidas.

Resistencia / durabilidad

"A pesar de su tejido, soporta muy bien las salidas."



A pesar de la apariencia de fragilidad del tejido de la Scott RC PRO TR’ 4, este aguanta y soporta el peso del chaleco lleno hasta el tope. Tras las numerosas salidas en que lo hemos utilizado, no se observan deformaciones de ninguna clase. La tela, por cualquier zona, continua como al principio de las pruebas.

Además, las dos cremalleras siguen rodando a la perfección (eso sí, evitar que se acumule sudor, ya que al solidificarse, suelen impedir que corran correctamente), el nivel de elasticidad de los bolsillos no se ha visto afectado y las gomas de sujeción delanteras aguantan a la perfección.

Ello no obsta a que se pueda enganchar con alguna rama punzante o pueda resultar dañada consecuencia de alguna caída, por ejemplo.

Ha pasado dos veces por la lavadora y varias otras puesta a remojo en agua fría, sin que se observe ningún tipo de deterioro.

Autor: Fernando Pérez