Petzl E+Lite VS Black Diamond Revolt

Dado su reducido tamaño, el Petzl E+Lite presenta una construccion sencilla. En la carcasa delantera se alojan los tres leds blancos y el led rojo de que dispone, así como también las dos pilas tipo botón (CR 2032) que lo hacen funcionar. Todo está pensado para ocupar lo menos posible, para resultar lo más funcional posible, pues el Peztl E+Lite pertenece a una nueva modalidad de frontales ideados para situaciones de emergencia. La sujección se logra mediante dos sistemas diferentes: una banda elástica y muy fina con cierre de tanka o bien mendiante sistema clip que permite sujertarlo allí dónde precisemos (cuello, mochila, gorra, la solapa de una chaqueta, etc.). El conjunto, además, resulta estanco a un metro de profundida durante 30 minutos; es lo que se denomina IP67: estanqueidad hasta 1 metro de profundidad por ese tiempo.

La construcción del ReVolt es muy simple, pues por una parte tenemos la cinta de sujeción, y por la otra la lámpara. De este modo, con una fácil maniobra podemos separar las dos partes, cosa que agradeceremos al querer lavar la cinta. Esta es regulable y elástica, y podemos correr la lámpara hasta dejarla en cualquier posición. Una vez puesta nos olvidamos de ella, pues la presión queda repartida gracias a sus 25mm de ancho. Dentro de la lámpara encontramos 5 leds distintos. El Triple Power Led es el central y más potente, con 110 lúmens, independiente de los demás. En los laterales disponemos de dos, los Single Power Led, ofreciendo 25 lúmens. Entre el led central y los dos de los laterales, encontramos otros dos de visión nocturna, de color rojo, de menor intensidad (2 lúmens). Las pilas que utilizamos en el frontal de Black Diamond son 3 del tipo AAA. Y aquí es, como hemos dicho, donde encontramos el punto fuerte del producto, pues pueden ser recargadas dentro del mismo frontal. Tenemos la posibilidad de hacerlo mediante un USB, un conector a enchufe eléctrico o al coche… o si no, podemos cambiarle las pilas. Así, si queremos usarlo durante largas horas, con 3 pilas de recambio en la mochila nos aseguraremos de no quedar sin luz. La posibilidad de recargar el ReVolt nos gusta, pues el conector es el mismo que utilizamos en los cargadores de smartphone, y ya sabemos que hoy en día salen los cargadores de debajo las piedras (o casi). El conjunto del frontal no es estanco, solo va a soportar salpicaduras o un poco de lluvia.