Hoka Speedgoat W VS Saucony Peregrine 6

La imagen visual que nos transmiten las Hoka One One Speedgoat W (unas zapatillas con una gran suela) no se corresponden con el peso real una vez que las cogemos y comprovamos en báscula, 244 gramos. Sí señores, unas zapatillas muy muy ligeras. Una vez puestas y caminamos notamos una gran amortiguación, comodidad, como sujetan el pié sin aprisionarlo, y lo más novedoso, al caminar notamos en la suela una sensación ligeramente pegajosa, explicado de una forma extrema para que os hagáis una idea. Esto es debido a su suela Vibram Megagrip, la cual explicaremos en su sección. Las Hoka One One Speedgoat W son muy fáciles de poner, con unos cordones largos, de forma que puedas abrir al máximo el upper para introducir el pieé sin el riesgo que se salgan de los ojales. La lengüeta es corta finalizando en el último ojal de los cordones, no obstante cómoda, y el upper fino, pero con la suficiente resistencia para sujetar el pie. Unas zapatillas muy cómodas que prometen mucho, vamos a comenzar a ver cómo se comportan en el exterior.

Nos calzamos las Saucony Peregrine 6, y se confirma la sensación de ligereza que expresábamos al sacarlas de la caja. Tenemos la sensación de llevar más unas zapatillas de asfalto que unas offroad! La horma no es estrecha y nuestro pie se acomoda perfectamente a la zapatilla. Al anudarla, podemos controlar el nivel de sujeción, que notamos muy homogénea. Salimos de casa, y las Saucony Peregrine 6 nos invitan claramente a correr. Sorprende de entrada el buen comportamiento que tienen ya sobre el asfalto. Buen comportamiento que se confirma en los primeros kilómetros de pistas y de senderos. La respuesta es muy reactiva, no quedando “enganchada” cuando nuestra pisada impacta en el suelo, sin menoscabo del buen agarre de la suela. El drop de 4 mm y la flexibilidad general de la zapatilla nos permiten de forma muy natural entrar de metatarso. Nos sentimos muy a gusto con ellas. Las primeras sensaciones no podrían ser mejores.