Hoka Challenger ATR VS Hoka Rapa Nui 2

A la hora de calzar las Challenge ATR lo primero que notamos es la diferencia entre el upper tan fino con la tan elevada mediasuela. A primera vista y tacto parecen dos mundos distintos. El upper es super amable, los cordones corren bien, la lengüeta es fina y nos permite calzar la zapatilla sin problemas. En cambio, notamos que debajo del pié tenemos una plataforma muy grande y algo dura... Así que las primeras sensaciones son algo... extrañas. Como siempre, antes de correr, damos unos pasos con la zapatilla, forzando la flexibilidad, dando saltos de puntillas, viendo qué tal la flexibilidad... Evidentemente, la primera respuesta es que no tenemos una mediasuela habitual debajo de nuestro pié, cuesta algo más hacer los movimientos, nos notamos alejados del suelo... De golpe pensamos... Hay algo raro... "¿No debería notar un exceso de peso en una zapatilla con perfil tan alto?". Y es que en Hoka One One cuidan con mucho detalle el peso de sus zapatillas, y en el caso de las Challenge ATR se refleja rápidamente, son superligeras! Lo segundo y definitorio para que nos entren ganas de salir corriendo es su comodidad; sin duda las Challenge ATR son un modelo pensado para correr, pero con comodidad, tanto gracias a su amortiguación como por los detalles del upper.

La primera sorpresa, después de sobreponernos, nos la llevamos cuando las sacamos de la caja y las sostenemos con las manos. Aquí pasa algo raro. Esperas que sean unas zapatillas muy pesadas y la realidad es que no lo son, en absoluto. De hecho, para lo que abultan, se notan muy ligeras (343 gramos la talla 11US, 292 en la talla 8.5US) y parece que haya un desfase entre lo que ves y el peso que sientes. Con esa sensación de sorpresa nos las calzamos y aquí conocemos un nuevo estado de comodidad. Todo se nota muy agradable y muy blandito. Nada aprieta por ningún lado y todo está pensado para envolverte los pies de forma que notes todo acolchado. Son super cómodas y muy amortiguadas. Y, sí, no sabemos si volar es así pero es indiscutible que, por lo menos, la sensación es de flotar.