Garmin Fenix 5X Plus VS Suunto Ambit3 Peak Sapphire

El Garmin Fenix 5X Plus ha levantado pasiones entre la mayoría de las personas con las que he entrenado estos días. Es un reloj sobrio con un excelente diseño que se puede  utilizar en  nuestro día a día sin llamar la atencion. Este reloj ha sido diseñado para ser utilizado durante las 24 horas del día ya que nos monitorea toda la actividad, incluso el sueño.  La función Abnormal HR alert nos ayudará a saber si tenemos algún valor extraño en nuestra pulsaciones durante las 24 horas del día.
La adaptabilidad del Garmin Fenix 5X Plus a nuestra muñeca es perfecta. Nos encontramos con un reloj que pesa de 87 a 96 gramos según la correa elegida. La visión de pantalla es correcta, ya que ha aumentado de los modelos. Ahora crece hasta 1,2 pulgadas gracias, sobre todo, a la reducción del borde.  La caja de este reloj es la más grande de la gamma pero no ha supuesto ningún problema a la hora de correr o hacer actividad con ella.
Ha sido fabricada en cristal de zafiro, para evitar las ralladuras propias de toda actividad. Durante todas las salidas que hemos realizado durante este mes de prueba, no hemos tenido ningún daño a pesar de las rozaduras. El clip óptico del Garmin Fenix 5X Plus es el encargado de leer nuestras pulsaciones durante las 24 horas del día sin necesidad de llevar la correa del pecho.

Cómo si de una joya se tratara, la presentación del Suunto Ambit3 Peak Sapphire HR es cuidada y delicada. Abrimos la caja con ganas, y no podemos estar más de acuerdo con los finlandeses en lo que a presentación se refiere, pues la finísima estética de la esfera nos atrae desde el primer segundo y nos pide a gritos que la coloquemos en nuestra muñeca. El cristal zafiro (más resistente que el normal) en combinación con el acero de la esfera le otorgan un aire muy elegante, característica que lo distingue del resto de relojes de la serie Ambit3, de estética más deportiva. Además, estos materiales combinan a la perfección con el plástico negro que alberga el GPS y la correa de silicona. Pese a sus 92gr, desconfiamos de sus dimensiones y pensamos que los 50mm de diámetro y 18mm de grosor serán demasiados para correr cómodos… hasta que lo colocamos en su sitio y lanzamos el brazo unas cuantas veces, siempre con el mismo resultado de comodidad. Empezamos bien. Los cinco botones de los que dispone tienen la justa medida, muy fáciles de encontrar y con una evidencia de funciones tal, que lo ajustamos sin mirar las instrucciones. En la caja del Suunto encontramos el cargador de batería, un manual de instrucciones y la cinta del pulsómetro, que nos sorprende con su finura y adaptabilidad, pues tanto la cinta textil como también los dos sensores de pulso se doblan y deforman con muchísima facilidad. Como no podría ser de otra manera nos la colocamos en su sitio, y después de un rápido ajuste y unos primeros pasos, nos olvidamos de ella. Perfecto.