Las primeras sensaciones que uno tiene al manipular la mochila RaidLight Ultra Vest Olmo 12 L son las comunes a la mayoría de mochilas de la marca Raidlight: se trata de un producto ligero y ciertamente complejo por su infinitud de detalles técnicos en su composición. Es una mochila verdaderamente muy pensada, muy articulada.
La ligereza, marca de la casa, la constatamos en la fina tela de poliamida que configura todas las partes de la mochila excepto las que están en contacto con el cuerpo, que requieren una mayor robustez y acolchamiento. La mochila pesa apenas 530 gramos.
Una vez puesta, a la persistente sensación de ligereza debemos unir la de comodidad. La mochila Raidlight Ultra Vest Olmo 12 L se adapta a la espalda de manera suave y envolvente. Las cintas pectorales permiten un ajuste correcto, pese a que advertimos que se sitúan ambas muy arriba, en una zona ciertamente alta del tronco, en la parte del esternón. Posee un sistema de cintas dobles regulables interesantes en tres partes de la mochila: la clásica unión de los tirantes a la parte baja, una sorprendente cinta que refuerza la unión de la parte más alta de la mochila con los propios tirantes y, por último, las cintas de cierre pectoral. El juego entre estas distintas cintas permite una adaptación muy buena a las características y medidas de cada corredor.
Pese a que su capacidad se halla repartida en múltiples compartimientos, constatamos que la Raidlight Ultra Vest Olmo 12 L es una mochila verdaderamente capaz y además versátil. Sus 12 litros son reales y absorben sin problemas el material que un corredor relativamente prudente necesite para salir a la montaña en un día frío y con meteorología complicada, pero además posee infinidad de bolsillos y una gran malla exterior que puede albergar objetos verdaderamente voluminosos, por lo que su capacidad aumenta sensiblemente.
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