Las prendas de Trail Running suelen ser de colores llamativos y Buff incorpora además de los colores, un diseño para acabar de darle un toque a la chaqueta. La Buff Ultralight Iroquois no es una chaqueta con la que pasaremos desapercibidos, la combinación de colores que hemos recibido es bastante llamativa. También hay otra versión menos llamativa en color gris y blanco. Además lleva capucha para los días más ventosos o un poco lluviosos. Mangas con gomas elásticas para favorecer el cierre pero sin presiones y un bolsillo generoso en la parte inferior de la espalda.
Una vez puesta la Buff Ultralight Iroquois es una prenda muy cómoda, la malla interior hace que el tacto en la piel sea suave. Si salimos solo con una primera capa de manga corta y la Buff Ultralight Iroquois notaremos la rejilla que nos aísla de la capa más rígida y acartonada. Toda la chaqueta es bastante ancha y solo las mangas son un poca más cortas que con el resto de marcas.
La Buff Ultralight Iroquois esta construida con al tecnología Ultralight como su propio nombre indica. Esta tecnología consigue una buena protección contra el viento y la lluvia fina con un peso muy contenido. Muy recomendable para días frescos o ventosos. Más recomendable usarla con un modelo de dos capas, con una camiseta de manga corta o larga debajo en conjunto con la Iroquois. Nos protegerá del frio y a la que empecemos a correr notaremos que es perfecta para esos días.
Toda la parte del cuerpo de la Buff Ultralight Iroquois no es ajustada dejando libertad de movimiento. Las mangas no son muy largas pero si anchas, la verdad es que son un "pelo" justas y puede que tengamos que coger una talla superior si queremos que nos vayan desahogadas, por la parte interior, están forradas con una tela para aislarnos del textil exterior y tener un tacto más suave en el contacto con la piel, si es que estamos corriendo con manga corta como primera capa.
La Iroquois lleva gorro ajustable mediante un mosquetón por la parte posterior de la cabeza para poder ajustarlo correctamente. En la parte delantera, lleva el cordón normal para ajustarlo a la cara, pero no incorpora mosquetón, sino que se ajusta mediante una muesca que al subir el cordón hacia arriba, queda bloqueado y evita que no se baje. Funciona muy bien cuando estamos en carrera, no es necesario usar las dos manos para ajustar el gorro correctamente, con una mano y un pequeño movimiento lo tenemos resuelto.
Si subimos la cremallera hasta arriba la chaqueta nos cubre hasta la nuez y la cremallera queda protegida con una sola para que no nos produzca rozaduras. El cuello no queda muy ajustado, esto nos ayuda a la transpiración de la Iroquois cuando la llevemos completamente cerrada y evitará que nos roce en el cuello y sobretodo evitar que se produzca sensación de ahogo.
Una vez puesta, la Buff Ultralight Sprinters destaca por su poco peso que permitirá que la podamos llevar en la mochila o atada sin notarlo y su tacto bastante plástico, un tanto extraño.
La Buff Ultralight Sprinters está compuesta por 100% poliester y, como decíamos, tiene un acabado muy plástico que hace que sólo sea recomendable cuando tengamos algo de frio o cuando caigan algunas gotas, ya que penaliza la transpirabilidad del sudor al exterior. Su uso se limita a los momentos de lluvia que nos pueda sorprender o cuando sople bastante viento en algún collado, pero recomendamos desprendernos de ella en cuanto notemos algo de calor.
La Buff Ultralight Sprinters es bastante holgada para no tener tirones al correr sin importar si llevamos varias capas debajo. En la cintura tiene una goma que puede ser tensada por un sistema de mosquetones a ambos lados que cierra la chaqueta para evitar la entrada de aire por la cintura.
Las muñecas presentan una goma que hace que las mangas queden bien fijadas sin moverse.
El cuello de la chaqueta cierra bien impidiendo que entre aire por ahí. Presenta además una pestaña para protegernos la piel del cuello cuando la cremallera esté subida. La Buff Ultralight Sprinters tiene una capucha pero no dispone de bolsillo en el cuello para poder guardarla en él por lo que la capucha siempre va colgando por la espalda. Su acabado plástico hace que se note continuamente un murmullo mientras corremos que puede ser molesto.
A la altura del cuello en los dos lados podemos ajustar la capucha tensando unas gomas y bloquándolas al situarlas en una guía que pellizca la misma goma evitando que se destense. Este sistema hace que el ajuste sea muy rápido y fácil de realizar incluso con unos guantes finos. En la parte de atrás de la capucha tiene una goma con sistema de mosquetón que permite acabar de ajustarla a la cabeza y hacer que se desplace lo mínimo.
