Black Diamond Icon VS Petzl SWIFT RL

PROS:
- Dentro de la robustez, es un frontal cómodo.
- Muy resistente contra polvo y agua (IP67).
- Fácil ajuste tanto de la luz como de las cintas.
- Se puede manipular bien con guantes.
- Se desmonta para lavarlo.
- Buena autonomía.
- Infinidad de opciones (intensidades, luces RGB, intermitente...)
- La opción "Boost" (máxima potencia) nos parece una de las mejores opciones del mercado para ir directamente a la máxima potencia de una manera rápida y fácil.

CONTRAS:
- El haz de luz es muy cerrado y con poca amplitud.
- Al tener un haz de luz más cerrado, hay más inestabilidad a la hora de proyectar esta luz. 
- Con la batería en la cabeza hemos experimentado rebote.
- La usabilidad de este Black Diamond Icon se nos antoja algo complicada con un único botón. (Hay que estudiar un máster para saber las combinaciones para cambiar de modos de luz).

POSIBLES MEJORAS:
- Para mejorar la calidad del haz de luz, podrían jugar con más de un led (uno de inundación y otro de profundidad).
- Sería interesante incorporar un segundo botón para poder navegar por las opciones de este Icon de una manera más rápida e intuitiva.

La casa Petzl ha querido crear un frontal totalmente diferenciado de su antecesor REACTIK, el cual dio muchos problemas debido al complicado manejo de sus luces, y como resultado han sacado al mercado uno de los frontales más potentes, ligeros y sencillos de manejar.


La linterna compacta Petzl SWIFT RL, es desmontable y lavable. Está fabricada en dos piezas:

1. El arnés de sujeción, compuesto:
En su parte delantera, de una cinta con un tejido suave al tacto con la piel y acolchada evitando molestas marcas, y con la cual no es necesario usar tubulares ni cintas extra para la cabeza. El resto, de una tira elástica de 1.5 cm de ancho, volviéndose doble en la parte trasera mejorando el ajuste y facilitando el uso de coleta en las mujeres. La forma de ajuste es muy fácil, con sólo estirar de los pasadores laterales se gradúa sin problemas. Esta tira viene recubierta de dos líneas discontinuas reflectantes (faltará por ver si se acepta en las ultras en substitución de la luz roja).

2. El frontal + carcasa de soporte:
De forma rectangular y medidas 6 cm ancho x 4 cm alto x 3.5 cm profundidad, está construido de PVC rígido e incorpora 2 luces + un sensor REACTIVE LIGHTING.
Justo encima del sensor viene un indicador de carga de la batería en 5 niveles, el cual se activa cuando enciendes el frontal, cuando lo apagas, cuando lo pones a cargar y cuando pones la batería.
Si seguimos subiendo encontramos el sencillo interruptor, con un sistema de bloqueo deslizándolo fácilmente hacia un lado. De este modo evitamos encendidos accidentales. Inicialmente pensamos que era un extra innecesario, no obstante vivimos en nuestras propias carnes la Ley de Murphy cuando una tarde vimos nuestra mochila de deporte iluminada.

Entre la parte trasera donde se ubica la batería y la frontal, se puede observar una ranura, si no conoces la potencia de este frontal y usas la coherencia puedes llegar a plantearte si sirve para poner una tarjeta SD, ¡pero no! Es para nada más y nada menos que para refrigerar, y ciertamente funciona. Dejamos toda una tarde y una noche el frontal encendido y al levantarnos al día siguiente lo tocamos y no estaba caliente (cabe decir que seguía encendida, aunque a una intensidad menor). Si bien es cierto que es recomendable no tapar las aberturas ya que entonces sí se calentará, ¡ojo con los gorros!
El frontal Petzl SWIFT RL viene con una batería estanca de iones de litio de 2350 mAh, recargable a través del puerto USB tipo B (viene con un pequeño cable de conexión, sin el adaptador de la luz), e intercambiable, y tal y como hemos comentado antes, incorpora un indicador de carga de 5 niveles.