Arc'teryx Norvan VT VS Puma Speed 300 TR Ignite

Resulta curioso calzar por primera vez las Arc’teryx Norvan VT y  detectar la primera de las numerosas innovaciones que aportan: se trata de la sustitución de la lengüeta por una polaina que envuelve completamente la parte superior del pie, desde de la puntera hasta el talón. Para colocarla correctamente a la primera, nos ayudaremos de las presillas situadas en las zonas del talón y de la zona superior del empeine. Sin necesidad todavía de anudar el cordaje, notaremos un excelente ajuste en todo el pie, gracias a la elasticidad del tejido de la polaina.
Una vez anudadas, el ajuste se hace firme y contundente, transmitiendo una cierta rigidez en el conjunto de la zapatilla. Los primeros pasos resuenan sobre el terreno, confirmando esta sensación de dureza. Sin embargo, el pie no se siente aprisionado, seguramente porque la horma es suficientemente ancha como para permitir una cierta movilidad interior. Por ahora, nos sentimos cómodos con ellas.

A primera vista parecen unas zapatillas de asfalto para tiradas largas, pero si nos las miramos con más mimo encontramos pequeños detalles que delatan su aire montañero. Para empezar poseen una suela taqueada que delata sus aires montañeros, su uper es de agradable tacto y muy moldeable (quizás demasiado ).
Su peso es bastante liviano, unos 278gr , que en zonas de pista se agradece esa ligereza. Cuando nos la calzamos vemos que estas Puma Speed 300 TR Ignite se adaptan perfectamente a nuestra horma del pie, apretamos los cordones y enseguida observamos que la sujeción que nos ofrezca en zonas complicadas no será su fuerte.
Por otro lado al empezar a correr notamos como la zapatilla es amable y fácil de domar, tenemos la sensación de que no es el primer día que las llevamos. Así que vamos al lio y empezamos a “desnudarlas”.