Adidas Terrex Boost VS Raidlight Team R-Light 002

La primera vez que nos calzamos la Terrex Boost no cuesta nada entrar el pie ya que podemos abrir bien la lengüeta. Una vez ajustamos el sistema de atado rápido, el pie queda inmóvil dentro de la zapatilla, pero notamos también enseguida que todo el upper se clava demasiado en nuestro empeine, por lo que tenemos que ir con cuidado de no apretar demasiado. Las primeras sensaciones al caminar es de no ser una zapatilla demasiado pesada (325gr), y la amortiguación que percibimos es más bien poca en la zona del medio pie. Se nota algo más en la zona del talón pero no son incómodas de llevar. La flexibilidad, aunque con la mano cuesta un poco, con el pie no cuenta nada, por lo que no se nota una zapatilla demasiado rígida. Creemos que van a ser unas zapatillas que, aunque no estén destinadas a practicar Trail Running, vamos a poder correr perfectamente con ellas. Pues vamos manos a la obra y a hacerle kilómetros que es dónde notaremos todos sus virtudes y defectos.

Ya con las Team R-light 002 estudiadas sobre papel, dejamos de banda el manual de uso y nos disponemos a calzar las zapatillas. Las 002 son grandes, contundentes y nos asombra al ver que no son tan pesadas como nos podíamos haber imaginado nada más verlas. Nos cuesta una brutalidad calzarnos la zapatilla por primera vez. Intentamos tirar de la lengüeta para abrir la zapatilla y, sorpresa! No podemos! la lengüeta está cosida en toda la tela del upper. El agujero es el que hay y tenemos que meter el pie por allí dentro como sea. Para tranquilizaros os podemos decir, que ahora, después de muchos usos y con el mesh un tanto más dado ya nos es más fácil introducir el pie dentro de ella. La horma de las Raidlight se siente ajustada, sobretodo en la parte central del pie. Aún así, tenemos sensación de confort una vez con el pie dentro la zapatilla. Estamos bien con ellas puestas, cómodos y protegidos, incluso demasiado, tenemos la sensación de tener el pie sobreprotegido con tanto acolchado. Doy cuatro pasos con la zapatilla ya bien calzada y me quedo atónito al notar la amortiguación de la parte trasera. Es aquí donde me doy cuenta que Raidlight, a diferencia de muchas marcas que tienden al minimalismo reduciendo a mínimos las amortiguaciones, sigue apostando por un diseño con “extra de amortiguación”. A priori mis sensaciones son de llevar unos pequeños globos en la zona del talón a modo de flotador. Soy de los que prefiere suelas un tanto mas duras, veremos sobre terreno como funcionan y si cambiamos de opinión pasados los km.