GEL

HAMMER

Hammer Gel

DATOS TÉCNICOS

  • Peso 33 g
  • Precio 1,90 €
  • Temporada SS16

GALERÍA


CONCLUSIONES

Transportabilidad

El envase de los Hammer Gel es bastante pequeño, de unos 11 cm de alto x 5 cm de ancho, pero que al doblarlo casi se reduce a la mitad, con lo que aumentan las facilidades de porteo ya que pueden caber más en un bolsillo. Su tamaño (y contenido, de 33 g) nos permite llevarlo en cualquier bolsillo de nuestra mochila o chaleco de hidratación, e incluso en los bolsillos de los pantalones, ya que el espacio que ocupa es casi mínimo.
No obstante, habrá que vigilar con las aristas de la base del envase; éstas son bastante puntiagudas y pueden llegar a dañar el tejido de los bolsillos, especialmente si éstos son de rejilla muy fina.
El envase es bastante resistente pero aconsejamos no alojar los geles en zonas comprometidas o con mucha presión, ya que los mismos pueden llegar a petar, con el consiguiente “pringue” que nos acarrearía.

Introducción

Corría el año 1987 cuando Brian Frank empezó a vender suplementos nutricionales para deportistas de resistencia en su apartamento de San Francisco. Sí, dicho así no deja muy buena imagen, pero casi 30 años después, la firma Hammer Nutrition se ha convertido en un referente en la nutrición deportiva para atletas de larga distancia o actividades de larga duración, especialmente en el mercado americano, ya que en el nuestro, de momento, no lo es tanto. Hoy no solo comercializan geles y suplementos, sino también ropa, productos para el cuidado del cuerpo, estimuladores electrónicos musculares y demás accesorios.
Hoy en TRAILRUNNINGReview probamos los Hammer Gel, que como su nombre indica son geles energéticos destinados a dar ese plus de potencia para todos aquellos que les gusten las largas distancias. Se presentan en el típico envase pequeño y maleable, y los podemos encontrar hasta en once sabores diferentes. ¡Gustos para todos!

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REVIEW

Toma

Toma

Ingerir los Hammer Gel es bastante sencillo: arrancamos el tapón con ambas manos o bien con los dientes mientras sujetamos el gel con una mano. No es necesario arrancar la totalidad del tapón para la toma, ahorrándonos que la pieza se separe en dos. Para ingerir el gel podremos presionar con una sola mano mientras absorbemos, pero para vaciar el contenido debemos ayudarnos de ambas manos, ya sea para estrujarlo o bien para enrollar el envase para que salga todo el gel. Una vez acabado, el envase se dobla repetidamente hasta reducir cinco veces su tamaño inicial.
La densidad del gel nos ha parecido la justa: ni muy densa (que haga necesario el acompañamiento de agua tras cada trago del gel) ni tan líquida como para que se derrame el contenido nada más abrir el envase. El gusto en boca es muy suave y ninguno de los sabores probados nos ha empalagado ni lo hemos consumido con reticencias. Algunos geles, ya sea por su densidad o intensidad del sabor, son muy complicados de ingerir, especialmente cuando vamos a ritmos muy altos o hace mucho calor, que es cuando menos nos apetece consumir productos cuya dulzura son un exceso para nuestra garganta. Los geles Hammer parece que han tenido en cuenta este punto ya que sabor y textura nos ha parecido suave, permitiendo una ingesta fácil durante las pruebas.
La maltodextrina es la base de los geles, –en vez de recurrir a azúcares simples como la glucosa o fructosa- un hidrato de carbono derivado del almidón y de rápida asimilación además de otros ingredientes naturales. Como dato, casi la totalidad de sus geles cumplen con los preceptos de la religión judía (kosher).

Rendimiento

Rendimiento

La maltodextrina funciona tan eficazmente como la glucosa y más rápido que otros azúcares simples como la sacarosa o la fructosa, pero no produce un subidón instantáneo de energía en nuestro organismo, si no que es más bien progresivo, aunque también cabe decir que la ingesta que hemos hecho de los Hammer Gel ha sido entre 6-10 minutos, que es lo que recomiendan los especialistas en nutrición deportiva. El efecto de haberlo consumido se deja notar sin lugar a dudas, sintiendo un plus de potencia durante un período de tiempo prolongado. Y por otra parte, en ningún momento hemos notado una retirada inmediata de la energía de nuestro organismo; ésta realiza un abandono también paulatino sin que hayamos sentido el temido “bajón”.

Conclusión

Conclusión

Hammer Gel nos ha gustado. Nos permite ese extra de energía cuando el cuerpo nos lo pide o cuando lo creamos necesario. Sus sabores no son extremados y su textura permite una fácil ingesta sin que necesitemos ayudarnos de agua para tragarlos. Está claro que cada cuerpo es un mundo, pero nosotros no hemos tenido problemas en cuanto a su asimilación estomacal (incluso los hemos tomado en ayunas y el resultado ha sido perfecto). Además, su reducido tamaño permite ser llevado en casi cualquier bolsillo, y una vez apurado y doblado, el espacio que existe es mínimo. Si sois de los que buscáis geles energéticos basados en la maltodextrina (carbohidrato complejo), libre de gluten o azúcares simples, aquí tenéis una buena opción.

COMPARADOR

Vs.

Autor: Fernando Pérez

Fecha de publicación: 10/06/2016

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