VENTFREAK OUTDRY

COLUMBIA

DATOS TÉCNICOS

  • Peso 368 g
  • Precio 109,95 €
  • Temporada FW15

GALERÍA


CONCLUSIONES

Primeras sensaciones

La percepción inicial de zapatillas robustas no desaparece al enfundar nuestros pies en ellas. Notamos un upper un poco rígido, con una zona de talón que se ajusta mejor a nuestros pies que la zona de la puntera, lo cual puede ser un punto a favor para los que necesiten zapatillas con una horma mediana/ancha. Su peso en talla US 9,5 es de 360g, lo que nos sigue evidenciando que las Columbia Ventfreak OutDry no están concebidas exclusivamente para correr.
El conjunto de plantilla y mediasuela nos hace sentir muy cómodos, como también la libertad de movimiento del tobillo debido a la poca altura de la caña.
Decíamos que trataremos a las Ventfreak como cualquier zapatilla que nos llega a las oficinas de TRAILRUNNINGReview: sin ningún tipo de delicadeza.
Haremos las pruebas corriendo en Collserola, Montserrat y Los Pirineos, veremos si nos sorprenden.

Introducción

Columbia Sportswear Company nació a finales de la década de los treinta en Portland produciendo y comercializando sombreros (en aquel entonces se llamaba Columbia Hat Company). Pasaron pocos años y la casa cambió los sombreros por la ropa deportiva y de montaña, con la que se han ganado el reconocimiento internacional al cumplir con su intención de mantenernos “frescos, calientes, secos y protegidos”.
En esta ocasión analizaremos las Columbia Ventfreak OutDry, unas zapatillas que encontramos en su web en el apartado de multideporte. Debemos mencionar que la casa americana no tiene ningunas zapatillas exclusivas para correr, lo más parecido son sus modelos de calzado para senderismo ligero.
Al tener las Columbia Ventfreak OutDry en las manos vemos que no son unas zapatillas corredoras, más bien para trekking, pues son pesadas, robustas y con una estética que no da margen de error: zapatillas para senderismo... en terrenos no demasiado técnicos, lo que evidencias sus modestos tacos.
Su nombre ya indica que vienen equipadas con una membrana impermeable, la OutDry de la misma casa Columbia, que pondremos a prueba durante los tests.
Nosotros trataremos a las Columbia Ventfreak OutDry como unas zapatillas de Trail Running. ¡Veremos qué podemos hacer con ellas!


REVIEW

Mediasuela

Mediasuela

La mediasuela que equipa a las Columbia Ventfreak OutDry viene equipada con la tecnología Techlite, que según la marca hace de ella un elemento flexible, resistente y con una gran amortiguación, además de proporcionar una gran protección y comodidad. Con estos atributos en la mente hicimos la primera salida, comprobando así que Columbia no nos engaña. En este primer trote y en todos los que seguirán en este período de tests, corremos bien protegidos de los salientes del terreno, con una amortiguación correcta pero no excesiva, más generosa en la parte del talón.
De las virtudes otorgadas por Columbia la flexibilidad de su mediasuela es la menos acertada, pues se nota cierto acartonamiento al corre que aún se manifiesta más en nuestras pisadas laterales. No esperábamos este comportamiento, pues la mediasuela está agujereada en cuatro puntos (como podéis ver en la foto dos debajo del talón y dos en la zona de metatarsos), con unos orificios que la atraviesan totalmente para favorecer precisamente la capacidad de torsión y absorción de impacto, además de favorecer la transpirabilidad, de la que vamos a hablar en su correspondiente apartado. Esta rigidez nos mantiene aislados del terreno, cosa que no esperábamos al ver su grosor, que no es excesivo. Pero que guste o no notar el terreno es algo personal, así que no vamos a entrar a valorarlo.
Debemos ser conscientes que estamos tratando a las Ventfreak OutDry como zapatillas para correr y no como para practicar senderismo con algún trote suave, por lo que vamos descubriendo que son ideales.
Desconocemos las medidas de aislamiento del suelo, ni en la puntera ni en el talón, pero creemos que deben de estar situados entre los 15-18 y 25-28mm.

Lengüeta

Lengüeta

La lengüeta está cubierta por una capa de membrana impermeable. Está cosida al upper en los laterales, evitando así que entre agua, arena o pequeñas piedras, a la vez que queda fijada y sin posibilidad de desplazarse lateralmente. En su parte superior lleva cosida una pequeña cinta por la que pasan los cordones, para que quede bien fijada en su correcta posición. Al atarnos las Columbia Ventfreak OutDry el grosor de la lengüeta es suficiente para que no nos moleste la tensión de los cordones, tensión de la que nos olvidamos por completo al correr.
La altura de la caña es algo curioso en estas Ventfreak OutDry. Ya os hemos contado que no es demasiado elevado, lo que nos hace correr cómodos y con libertad total de movimiento de tobillo, pero a la vez permite la entrada de pequeños elementos sólidos… y de agua y nieve, cosa curiosa en unas zapatillas impermeables. Para correr sobre nieve serán indispensables unas polainas.

Sujeción

Sujeción

Columbia es una marca con una clarísima tradición montañera, pues todos sus productos están diseñados para nuestras salidas al aire libre.
Empezamos este nuevo punto con esta pequeña introducción porque los cordones de las Columbia Ventfreak OutDry parecen más bien cordinos. Son redondos, de unos 4 milímetros de diámetro y nada elásticos. Realizar un buen ajuste es muy fácil, pues corren muy bien dentro de las cintas de la cordonera.
Con un buen atado empezamos a correr, pero nos sorprende que al rato los cordones se aflojen… ¡con doble lazada! Creemos que esto se debe a la nula elasticidad de los cordones, algo que sería fácil de solucionar por Columbia de cara a siguientes modelos o versiones.
Las cintas de la cordonera están firmemente cosidas a la parte superior del upper, que al ser tan rígido, se va tensando a medida que tiramos de los cordones. Esto provocará que el ajuste a nuestros pies sea bueno en la mitad alta del upper. No acostumbramos a partir uppers por la mitad, pero este caso es curioso, ya que al ser la horma de las Columbia Ventfreak OutDry ancha nuestros pies siempre dispondrán de espacio en su parte baja (diríamos que plantar). Al correr en terreno fácil vamos cómodos y con los pies firmes a su colocación inicial, pero cuando la zona por la que corremos es más técnica y en pasos laterales en particular, llegamos a notar el movimiento de nuestros pies en el interior de las Columbia Ventfreak OutDry, lo que nos hace sentir inseguros y provoca que tengamos que reducir drásticamente nuestra velocidad. Hasta ahora estábamos hablando de la mitad delantera de la zapatilla, pues existe una gran diferencia entre el ajuste en la puntera y en el talón, que con un acolchado justo y una estructura con poca rigidez es capaz de mantenerse ajustado en cualquier situación.
Las zapatillas de Columbia son para corredores con pisada neutra.

Acabados

Acabados

La sensación inicial que tuvimos al ver las Columbia Ventfreak OutDry era de zapatilla tosca. Esto lo provoca su estética de calzado para trekking, con sus cordones anchos y la robustez de todas sus costuras. Con los ojos cerrados podemos reseguir todos los cosidos de la parte exterior del upper y encontrar fácilmente los de su interior. Dicha parte interior es un poco áspera, seríamos incapaces de salir con ellas sin calcetines. Al correr vamos realmente cómodos y no notamos ninguna costura, tampoco es molesto el justo acolchado del talón.
Si de algo pueden presumir las Ventfreak OutDry es de sus protecciones. Otra vez se hace evidente que Columbia tiene muy integrada la montaña y crea sus productos pensando en ella. Prueba de ello son sus generosas y efectivas protecciones en la parte del talón y en la puntera, donde los dedos gozan de una excelente seguridad. En los laterales no hay protecciones, pero la rigidez del upper es suficiente para que nos proteja al pisar y rozar alguna arista de piedra o raíz.
La plantilla por su parte viene muy agujereada, veremos en el siguiente punto el porqué de tantos agujeros. Es de una única densidad y de un grosor de unos 5mm. En la zona del talón está elevada en sus laterales, para favorecer nuestra estabilidad en esta zona. Columbia no nos cuenta si viene con algún que otro tratamiento antibacteriano, pero con nuestra propia experiencia os podemos asegurar que sí, pues a día de hoy, finalizando el período de pruebas, no detectamos olor alguno.

Impermeabilidad / Transpirabilidad

Impermeabilidad / Transpirabilidad

La imermeabilidad de las zapatillas de Columbia viene a cargo de sus membranas OutDry. Claro, de ahí su nombre. La casa americana crea el upper de la zapatilla, para después recubrirlo y pegarlo con su membrana. De este modo se suprimen juntas y costuras, que acostumbran a ser el punto débil de la impermeabilización. Hemos corrido sobre nieve y cruzado riachuelos para comprobar la efectividad de la membrana impermeable. Ha funcionado a la perfección. Como ya hemos comentado, el punto débil de entrada de cualquier elemento es en la zona del tobillo. Si realmente queremos correr secos no tendremos otra opción que correr con polainas. De no ser así, notaremos como el agua o la nieve va entrando en el interior de las Columbia Ventfreak OutDry y va empapando nuestros pies y generando un molesto problema, pues el agua no tiene salida dentro de las zapatillas. El material del upper no es absorbente, tan solo los acolchados del talón retienen un poco de líquido. Pero como podéis leer, si el agua consigue entrar será imposible terminar de correr con los pies secos, con el riesgo a que esto provoque que nos salgan las siempre molestas ampollas.
Claro que contamos todo esto teniendo en cuenta que estas Ventfreak OutDry son para salir en días húmedos y fríos, en los que no generamos suficiente calor como para secar el upper ni los calcetines.
En cuanto a transpirabilidad, la casa Columbia ha creado un curioso sistema. Ha agujereado la mediasuela en 4 puntos (de los que ya hemos hablado en la mediasuela) para favorecer la ventilación de nuestros pies. La teoría es que los agujeros de la plantilla favorezcan el paso de aire hacia la mediasuela, que permitirá un cambio de aire a través de sus agujeros. Hemos corrido en días fríos, pero también con temperaturas benévolas, de 15 a 20 grados, y nunca hemos tenido la sensación de correr con calor en los pies, lo que evidencia que su sistema de transpiración es efectivo. No olvidemos que el upper viene recubierto con la membrana impermeable, así que la evacuación del calor solo es posible por la parte del tobillo y por el comentado sistema de aireación de la mediasuela.
Pero aquí vuelve a entrar en juego la idea de Columbia de crear unas zapatillas multideporte, con las que nos garantizan un “confort durante todo el día”. Podemos imaginarnos al finalizar un día de trekking habiendo gozado de una total comodidad en nuestros pies.
Pero ya sabéis, como vosotros, en TRAILRUNNINGReview corremos.

Suela

Suela

Es habitual que Columbia equipe sus modelos con sus suelas OmniGrip. Compuestas de caucho, nos cuentan que ofrecen un máximo agarre sobre todo tipo de terreno. Pero al ver los tacos dudamos de tal afirmación, pues no son muy agresivos y no parecen diseñados para correr en zonas técnicas. Sus tacos perimetrales en forma de L y los centrales, con los mismos descritos agrupados de tres en tres, tienen aristas encaradas a cualquier dirección. En la puntera y el talón, unas discretas líneas deberán de encargarse de nuestras frenadas y despegues.
En la práctica, al salir de zonas confortables en las que la suela se comporta muy bien, es donde hemos puesto la suela de las Columbia Ventfreak OutDry (y en consecuencia a nosotros mismos) en apuros. Sobre tierra, hierba, piedra o nieve sin más complicación, su comportamiento es bueno. Al empeorar las situaciones, ya sea metiendo desnivel positivo o negativo, como también mojando las piedras (y esto nos ha sorprendido tratándose de unas zapatillas con membrana impermeable), los tacos pierden efectividad y nuestro nivel de seguridad disminuye a la par con nuestra velocidad. Es inevitable resbalar en bajadas técnicas con roca mojada, pero también con tierra descompuesta o hierba húmeda.
Otra vez nos queda claro que las zapatillas de Columbia no han sido diseñadas exclusivamente para correr.

Durabilidad

Durabilidad

Las Columbia Ventfreak OutDry parecen a simple vista unas zapatillas pensadas para que duren quilómetros y quilómetros… Cierto es que las pruebas a las que las hemos sometido no son precisamente fáciles, más teniendo en cuento que no son unas zapatillas corredoras.
No queremos ser cansinos repitiendo esto en cada punto, pero no nos podemos olvidar de ello. Tampoco que ni los mismos americanos de Columbia nos ofrecen sus zapatillas como corredoras.
Si tenemos esto claro y no nos olvidamos de que los tests han sido los mismos a los que sometemos a prueba a cualquier zapatilla, no podemos ser duros al hablar de su durabilidad.
En general el upper se mantiene íntegro y sin aparentar desgaste alguno. Tan solo en un lateral (como veis en la foto), empezó a despegarse una parte de la capa de “embellecedor”, dotado de unas líneas plateadas que a priori parecían reflectantes pero que no lo son.
La parte que más ha sufrido durante las pruebas ha sido sin duda alguna la suela. Podéis ver en la foto como una parte de un taco ha desaparecido, también se aprecia como en general el desgaste se hace muy evidente en ella.

Conclusiones

Conclusiones

Llegamos a las conclusiones muy seguros de lo que Columbia nos cuenta: las Columbia Ventfreak OutDry no son unas zapatillas para correr. No encontramos en su web ningún video donde salga algún corredor con ellas en los pies.
Son ideales para quien busque un calzado para la práctica del senderismo sobre terrenos fáciles, con algún trote suave ocasional.
Un buen público para las Ventfreak OutDry es aquel que busca unas zapatillas cómodas para participar en rutas senderistas y marchas de resistencia, pues encontrará en ellas unas fieles aliadas. Además a su favor tienen su efectiva membrana impermeable OutDry. Recordemos que no vienen provistas con ningún control de pisada y que su horma es ideal para deportistas con pies un poco anchos, con un peso inferior a los 80 quilos.

COMPARADOR

Vs.

Autor: Joan Brugarolas

Fecha de publicación: 07/02/2016

TRAILRUNNINGReview